miércoles, 23 de junio de 2010

HOY PUEDE SER UN GRAN DIA


En realidad no nos damos cuenta. No somos conscientes de lo grandes que son las pequeñas cosas.

Disfrutar de un día luminoso después de tanta lluvia; tomar un buen helado cuando aprieta la sed; mirar la grandeza de un peñasco rasgando soberbio el cielo; la brisa dando el primer color a nuestra cara; cantar desentonadamente la música que nos devuelve al pasado; reir a carcajadas hasta llorar; saborear una buena carne; pasear, sin prisa, tranquilamente.

En realidad no nos damos cuenta. No somos conscientes de lo grandes que son las pequeñas cosas.

Y se hacen más grandes, mucho más grandes, si tenemos con quien disfrutarlas, con quien compartirlas. Si tenemos momentos comunes, historias comunes, recuerdos comunes. Si vemos alegría en sus ojos, una sonrisa en su boca, serenidad en su rostro, satisfacción en su compañía. Y nosotros por eso estamos más alegres, más sonrientes, más serenos, más satisfechos.

Tenemos que vivir las pequeñas cosas; porque las grandes, muchas veces, no se viven, sólo se sueñan.

1 comentario:

J. Manuel Muñoz dijo...

Las pequeñas cosas que hacen grande la existencia, ese "llenar de vida los años en lugar de años la vida"
Las mejores vivencias con la mejor compañia....