LA OTRA REVOLUCIÓN

Aunque existen excepciones, la mayoría de las sociedades se han conformado con una estructura de poder en la que la mujer siempre tenía un papel secundario cuando no marginal.

Afortunadamente en este siglo y en nuestro mundo, las mujeres hemos ido ganando protagonismo a base de una lucha constante, silenciosa, pacífica no contra los hombres, sino contra su omnímodo e injusto poder.

Sin embargo, queda mucho por hacer. Y lo que es peor, hay muchos lugares en el planeta en que queda todo por hacer.

Hoy en día, nacer unos miles de kilómetros más al sur significa para una niña aspirar a una vida radicalmente diferente: no tiene derecho a la educación; se le somete a la humillante ablación, se negocia con su matrimonio, es mercancia sexual.....

Las mujeres del "primer mundo" no podremos darnos por satisfechas en tanto las haya sometidas en cualquier rincón de la Tierra. Esa es la revolución pendiente. Y se tiene que empezar por luchar contra la pobreza, que es el sólido cimiento que sostiene la desigualdad.

VA POR VOSOTRAS

Llevams juntas.....ni se sabe los años. Nuestras vidas, cada una por su lado, sin embargo han ido paralelas. Hemos sido niñas, jóvenes y mujeres. Hemos sido esposas y madres, profesionales y amas de casa. Y siempre amigas

Por eso ¡va por vosotras!.

Mi agradecimiento por haberme escuchado cuando necesitaba hablar; por haber confiado en mí cuando me tocaba escuchar; por la comprensión, la complicidad, los consejos y los silencios.

Por eso ¡va por cosotras!

Mi agradecimiento por las risas y los llantos; por el tiempo dedicado en los buenos y en los malos momentos; por entenderme tal como soy; por disfrutar del simple hecho de pasar un rato juntas.

Por eso ¡va por vosotras!

Y mi admiración por ser el mejor espejo en que mirarme cuando no sé cómo es mi rostro.

Sabed, por si no lo sabéis aún, que en la tarta de mi vida sois un trozo muy grande.

LA SABIDURÍA

Aunque corren malos tiempos y el pensamiento positivo puede ir contra corriente, o quizás por eso, hay muchas cosas admirables que hay que reconocer al género humano. Y una de ellas, de entre las primeras del ranking, es la sabiduría. Esa capacidad innata de aprender, unas veces de las enseñanzas y las más de las experiencias.

Tropezamos y nos tambaleamos; incluso nos caemos. Pero vamos reconociendo lo que, dadas unas circunstancias, sucede con alta probabilidad. Esto es el aprendizaje empírico y lo que más nos vincula con nuestra matriz animal.

Pero es la sabiduría de la enseñanaza la que me despierta más admiración cada día. Porque es justamente esa la que nos eleva de ese carácter animal y nos convierte en seres especialmente racionales, más académicos. Qué estimulante resulta ver a tanta gente que se supera cada día con el esfuerzo y la ambición de aprender.

Porque esa es sin duda nuestra mayor y mejor riqueza, lo que jamás desaparece con el vaiven de la bolsa, la que nunca entra en crisis y podemos llevar con nosotros donde quiera que vayamos.

EMPATÍA

Es propio del espíritu de supervivencia tener memoria selectiva. Olvidar aquello que nos hizo sufrir. Una vez superamos las dificultades nuestra mente se esfuerza por borrar las experiencias negativas. Y sin duda es saludable.

Pero nuestra capacidad de ponernos en el lugar del otro, esa empatía, especialmente cuando atraviesa por momentos de dificultad, nunca debemos perderla. No siempre podemos hacer algo por levantar al caído, por animar al deprimido, pero comprender al otro en su situación, nos eleva moralmente. El otro también es un yo con sus problemas y más triste que alguien con dificultades es alguien solo ante ellas.

Si hay algo que es verdad absoluta es que nada es seguro. Y eso es lo bueno y lo malo de nuestra existencia. Que todo puede cambiar y en ese cambio ponen mucho quienes nos acompañan.